La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA) ha publicado los datos derivados de una iniciativa de muestreo llevada a cabo en 2022 y 2023, destinada a examinar la miel importada en busca de adulteración por motivos económicos (EMA, por sus siglas en inglés).
La EMA, una práctica preocupante, se produce cuando se añaden, eliminan o sustituyen sustancias en los productos alimentarios para mejorar su aspecto o valor. En este caso, la FDA se centró en detectar edulcorantes no declarados más baratos que la miel, como jarabes de caña y de maíz. En el muestreo se tomaron 107 muestras de miel importada, de las que un 3% resultaron infractoras. Aunque no es estadísticamente comparable, esta tasa es notablemente inferior al 10% de muestras infractoras descubiertas en la asignación 2021-2022.
La FDA toma medidas inmediatas cuando descubre infracciones, incluida la denegación de entrada en los EE.UU. y la colocación de los productos y empresas asociadas en Alerta de Importación (AI). La agencia mantiene su compromiso de mejorar los métodos de detección para salvaguardar a los consumidores. Estos resultados ponen de relieve la vulnerabilidad de la miel a la EMA, lo que refuerza la dedicación de la FDA para garantizar que los consumidores reciban productos auténticos.
La FDA seguirá examinando las importaciones de miel en busca de EMA y aplicará medidas de cumplimiento, incluidas posibles investigaciones penales. La colaboración con socios reguladores nacionales e internacionales sigue siendo esencial para combatir la EMA en todos los productos alimentarios, incluida la miel.
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